SOFÍA DE LA VEGA
LOS ÁNGELES SON VACAS
NEBLIPLATEADA
Páginas: 120
Formato:
Peso: 0.15 kgs.
ISBN: 9786319097900
Como el golpe de una naranja amarga en la vereda los poemas de
Los ángeles son vacas combinan los brillos y aromas de la pulpa estallada
con el calor gris y ríspido del asfalto. Los perros al sol, monjes. Santuarios,
los paisajes cenicientos por la caña de azúcar. Los besos rugosos de
animales, bálsamos. Los personajes, feligreses, pero no en una calma
procesión de sentidos, sino en una amarga y ponzoñosa escalada de
monte. No soy la poeta/ que mira el río y se calma. Un libro signado por
el incienso de la sensorialidad mística que contrasta con un lento y
pesado escaldo en las calles de San Miguel, como si cada poema fuese
sorber líquido de un cactus: única fuente de agua, amarga, brillosa y
psicodélica. El agua es mito: el mar como aquello que fue el valle. La
mística que practica el libro, entonces, no reside en abandonar el
cuerpo, volverlo liviano, no hay un salirse de sí sino un salirse del nosotrxs,
lo que se quiere abandonar es el paisaje social que abroja al cuerpo.
Poemas de ir viniéndose, de quien se trata de desenraizar, dado que lo
único que no corre en ese valle es el viento, pero al irse recuerda y al
venirse se va, sin nostalgia, no hay memorias frágiles que recuperar, más
bien inmersión, éxtasis, una posesión de la imaginación sobre el lenguaje.
Las vírgenes son triángulos, teros las custodian, el sendero es el de un
helado derretido y el clásico poema feliz de una persona en bicicleta
termina con una caída. El sol ardido de la poesía tucumana se refracta
en las cúpulas porteñas, seca el río donde soñaba bañarse Viel, y
encuentra paisajes dentro de paisajes, como las moradas de Santa
Teresa. Quien abra Los ángeles son vacas podrá sentir el sobresalto de lo
sagrado en la mística del desencanto. Matías Heer